BEATO IGNACIO FALZON, CATEQUISTA junio 2024 (Agenda del Catequista)
QUERIDOS CATEQUISTAS,
Este mes de junio, lo iniciamos recordando la vida de Ignacio Falzon, no fue sacerdote, pero se consagró a Dios para llevar el anuncio de la Buena noticia, os invitamos a conocerlo un poco más.
Beato Ignacio Falzon (nació el 1 de julio de 1813-murió el 1 de julio de 1865) de la Orden Franciscana Seglar
El Beato Ignacio nació y murió en La Valetta (Malta). Miembro de la Orden Franciscana Seglar o Tercera Orden Franciscana, fue clérigo, pues recibió las órdenes menores, pero nunca se consideró digno de recibir la ordenación sacerdotal. A su vida de oración y de gran devoción a la Eucaristía, unió una intensa labor de catequista, dirigida particularmente a los numerosos militares y marineros ingleses que entonces se encontraban en la isla de Malta.
Se consagró a la oración y a la enseñanza del catecismo. Fue muy devoto de la Eucaristía. La adoración y la meditación fueron su alimento espiritual, hasta el punto de suscitar la admiración de todos los fieles que frecuentaban la iglesia parroquial de San Pablo Náufrago y la franciscana de Santa María de Jesús. Nutría asimismo una devoción especial a la santísima Virgen y a san José. Rezaba todos los días el rosario.
Pionero en el campo del ecumenismo, desarrolló este apostolado con la ayuda de colaboradores laicos, algunos de los cuales se hicieron sacerdotes y capellanes militares o navales. Uno de ellos, que se quedó en Malta, continuó su misión.
Las gracias obtenidas por su intercesión divulgaron su fama de santidad no sólo en la isla de Malta, sino también en los países que acogieron y acogen a los emigrantes malteses.
Sus restos mortales fueron enterrados en la tumba de su familia en la iglesia franciscana de Santa María de Jesús, de La Valetta, donde han sido custodiados hasta el día de hoy.
El 9 de mayo de 2001 fue beatificado por San Juan Pablo II
COMO CATEQUISTAS, ¿QUÉ PODEMOS APRENDER DE ÉL?
1.- Un Catequista muy comprometido en su comunidad, se consagró a la enseñanza del catecismo
2.- Un hombre muy devoto de la Eucaristía, de la meditación.
3.- Tenía especial devoción a la Santísima Virgen María.
4.- Fue pionero en el ecumenismo, la relación con nuestros hermanos protestantes.
Podríamos quedarnos con estas cuatro virtudes de este beato franciscano que pueden ayudarnos a profundizar en la forma en que vivo mi compromiso como mujer u hombre comprometido con la Iglesia en este servicio de la Catequesis.
¿Con qué cualidad te identificas tú?
Podéis invitar a los chicos a conocer más sobre la vida de este beato visionando este vídeo aquí. Y después comentar que les llamó más la atención de la vida de este beato.