Pentecostés: Un soplo de vida nueva para la catequesis

Queridas y queridos catequistas:

Pentecostés es la gran fiesta del Espíritu Santo, el día en que la Iglesia nace y se lanza a anunciar con alegría el Evangelio a todas las naciones. Es también un momento privilegiado para renovar nuestra vocación catequética dejándonos transformar por el mismo Espíritu que impulsó a los apóstoles a salir sin miedo y con entusiasmo.

Este tiempo litúrgico nos recuerda que no estamos solos en la tarea de la evangelización. El Espíritu Santo nos acompaña, nos guía y nos da las palabras, la creatividad y la fuerza necesarias para llegar al corazón de las personas, especialmente de quienes acompañamos en el camino de la fe.

Pentecostés es una oportunidad para que nuestras comunidades descubran la alegría de creer y de vivir como discípulos misioneros. En la catequesis podemos aprovechar esta celebración para trabajar con los niños, adolescentes, jóvenes y adultos el significado de los dones del Espíritu, la riqueza de la Iglesia como comunidad viva y la misión de cada bautizado.

Animamos a cada catequista a preparar alguna actividad especial para esta fiesta: una oración comunitaria, una dinámica con símbolos (como el fuego, el viento…), un mural sobre los dones del Espíritu o incluso una pequeña celebración con cantos y testimonios.

Que este Pentecostés sea una ocasión para reavivar el fuego del Espíritu en nuestras comunidades y en nuestros corazones.

¡Ven, Espíritu Santo, y renueva la faz de la tierra!

Con gratitud y esperanza,

Delegaciones de Catequesis de Galicia